A pesar de que hay quien se empeña en publicar las supuestas contraindicaciones de termómetros infrarrojos, lo cierto es que este tipo de dispositivos se ha destapado como una de las medidas de prevención más fiables y seguras en la lucha contra el coronavirus. Hace un tiempo te explicamos cómo funcionan los termómetros láser, y hoy te contamos cuáles son los tipos que podéis encontrar en el mercado y, más importante aún, cuáles deberíais comprar sí o sí, ¡todo es poco para mantener seguros a los nuestros!
¿Qué es un termómetro de infrarrojos?
Aunque ahora mismo no sepas qué es un termómetro de infrarrojos, seguro que últimamente has visto más de uno y más de dos e incluso ya lo han utilizado contigo. Son los también llamados termómetros láser, pirómetros o, para que lo entiendas mejor, los termómetros sin contacto para medir la temperatura en distancias cortas. Su uso se ha extendido a raíz de la pandemia de coronavirus, así que ya sea en el aeropuerto, en el dentista o en la oficina, seguro que ya te han ‘apuntado’ con él en más de una ocasión.
Este tipo de termómetros infrarrojos sin contacto no necesitan tocar la piel para medir la temperatura corporal, lo que los hace más higiénicos que los termómetros normales. De ahí que su demanda, ante el temor del contagio de la Covid-19, se haya disparado (y nunca mejor dicho) a lo largo de los últimos meses.
Tipos de termómetros infrarrojos
Existen diferentes tipos de termómetros infrarrojos en el mercado, por lo que debemos aprender a elegir uno u otro en función de sus características y del uso que vayamos a darles. Por eso, si estáis pensando en adquirir uno, ya sea para vuestra casa o para vuestro negocio, echadle antes un vistazo a esta clasificación de termómetros infrarrojos digitales. ¡Así sabréis exactamente qué tipo de termómetros infrarrojos para personas echar a la cesta de la compra!
1. Termómetros infrarrojos tipo pistola
Son, probablemente, el tipo de termómetros infrarrojos que más habrás visto durante esta última época. Están diseñados específicamente para que resulten ergonómicos, así que encajan a la perfección en nuestra mano. Pero no solo eso, sino que están especialmente pensados para que sea otra persona la que nos tome la temperatura con ellos. El encargado de utilizarlo debe ponerlo a unos centímetros de nuestra piel, apretar el ‘gatillo’, generalmente con el dedo índice de una de sus mano, y la lectura, en una pantallita frente a sus ojos, le dirá ipso facto si tienes o no fiebre.
2. Termómetros infrarrojos frontales
Están especialmente pensados para que tomen la temperatura de nuestra frente. Cierto, normalmente la lectura rectal es bastante más fiable porque revela la temperatura del centro de nuestro cuerpo, no la superficial, pero no suele resultar la modalidad más cómoda para el sujeto. La mayoría de los termómetros infrarrojos tipo pistola encajan en esta tipología de dispositivo, aunque bien es cierto que también los hay que toman la temperatura de nuestros oídos.
3. Termómetros infrarrojos corporales
Los termómetros infrarrojos corporales son los que están preparados para cualquier otra zona del cuerpo que no sea la frente. Los que toman la temperatura auricular, que comentábamos hace un momento, pertenecerían a este tipo de termómetros infrarrojos. Estos son los más apropiados para tener en casa, ya que, como ya hemos mencionado, hay zonas de nuestro cuerpo más fiables que otras para saber qué temperatura exacta tienes en cada momento. Además, son ideales como termómetros infrarrojos para bebés.
Fiabilidad de los termómetros infrarrojos
Aunque parezca mentira (me pongo colorada cuando me mi-ras), los termómetros infrarrojos son bastante más fiables que ‘los de toda la vida’, es decir, los de mercurio. O incluso que los de galio, algo menos comunes en los hogares. Esto es porque los últimos se ven fuertemente influenciados por la temperatura ambiental, mientras que los termómetros infrarrojos médicos se limitan a hacer aquello para lo que fueron ideados. Lo normal es que tengan un margen de error de entre una y tres décimas, o lo que es lo mismo, que nos den un resultado de +/- 0.1 y 0.3 grados, algo bastante aceptable.
¿Cómo sabemos si nuestro termómetro es fiable realmente o no? Fácil, basta con hacer dos mediciones seguidas a un mismo individuo. Con tan poco margen temporal, lo más normal es que el termómetro tuviese que ofrecernos la misma medición en ambas ocasiones. De no ser así, es que algo pasa. Si tienes el manual de instrucciones del termómetro de infrarrojos, recalibrarlo no debería resultar complicado, pero… ¿qué pasa si lo has perdido?
Nada de nada, lo único que debes hacer es poner agua a hervir, tomar la temperatura de la misma cuando esté en ebullición y, si no mide 100º, corregir manualmente la cifra hasta que llegue ahí, ¡y listos!
Mejores termómetros infrarrojos del mercado
La verdad es que, tras hacer una búsqueda de opiniones sobre termómetros infrarrojos, no habríamos podido obtener mejores resultados. Estos son, para nosotros, los mejores termómetros infrarrojos que pueden encontrarse en el mercado.
- Termómetro Infrarrojos IDOIT: Con más de 2150 opiniones, este termómetro de infrarrojos de pistola conserva 4,5 estrellas sobre cinco, lo que vendría a ser un sobresaliente.
- Termómetro infrarrojo para bebés HYLOGY: Nos permite tomar la temperatura tanto de la frente del niño como de su oído, al igual que, por ejemplo, ser utilizado para determinar la temperatura del biberón, o del agua de la bañera.
- Termómetro infrarrojos digital Konjac: Nos hemos dejado lo mejor para el final, porque con más de 700 opiniones, este termómetro de infrarrojos conserva intactas sus 5 estrellas, un 10 sobre 10. Su precio tiene gran parte de culpa, y es que esos 35,99€ resultan de lo más golosos. ¡Para no pensárselo mucho, que vuelan!
¿Cómo elegir entre los termómetros infrarrojos?
A la hora de elegir entre varios termómetros infrarrojos, debes tener en cuenta estos dos detalles:
- El tipo de termómetro y el uso que vayamos a darle: En función de si lo quieres para un uso profesional o personal, necesitas un tipo u otro de termómetro. Para un negocio, por ejemplo, lo suyo es que optes por un termómetro de pistola frontal, mientras que para nuestro hogar, dentro de la medida de lo posible, deberíamos optar por termómetros infrarrojos corporales.
- El precio del termómetro: Basta con teclear en Google ‘termómetros infrarrojos precio’ para darse cuenta del amplio abanico que existe. Es lo que viene a llamarse ley de oferta y demanda: es un producto de lo más demandado, así que mientras haya gente dispuesta a pagar lo que se pide por ellos… seguirán sacándonos los cuartos. Por eso, si veis que dos termómetros son muy parecidos, pero su precio es muy diferente, optad por el que vaya a haceros un menor roto en la economía.