Llega la tecnología 5G que pretende revolucionar el mundo de la telefonía móvil. Sin embargo, existe una paradoja latente en torno a esta innovación porque, pese a que puede ofrecer muchas posibilidades que mejorarán nuestra asistencia sanitaria, son muchos los que piensan que el 5G será perjudicial para nuestra salud. Vamos a resolver algunas dudas sobre este asunto

¿Qué es el 5G?

El 5G permite navegar a una velocidad de hasta 10 gigabytes por segundo. ¿Eso es muy rápido? Es diez veces más rápido de lo que las principales ofertas de fibra óptica permiten ahora mismo en el mercado. Y no sólo se caracteriza por su velocidad, también por la reducción de la latencia, es decir, de ese retardo de respuesta en la conexión entre redes que hará que nos conectemos prácticamente en tiempo real, porque ese retardo podría llegar a reducirse hasta los cinco milisegundos, un tiempo casi imperceptible para el ser humano. Es una tecnología que cambiará nuestra forma de comunicarnos y que tiene tantas aplicaciones que hará que el mundo esté más hiperconectado que nunca.

¿Es peligroso el 5G para la salud?

Uno de los miedos más extendidos sobre la irrupción de la tecnología 5G es si puede resultar peligrosa para la salud porque existirá una hiperconexión en el planeta, es decir, que habrá muchos más dispositivos conectados al mismo tiempo, ya sea en casa o en las calles. En este sentido, hay que transmitir tranquilidad a la población. La propia Organización Mundial de la Salud, en un estudio publicado en 2006, aseguró que no hay pruebas científicas que certifiquen que la tecnología inalámbrica suponga un riesgo para la salud, pues las señales que se producen son débiles y no está demostrado que tengan consecuencias adversas para la salud. En 2020, la OMS señaló que, dado que todavía el 5G se encuentra en fase de implementación, es pronto para saber si repercute de forma negativa en nuestra salud e investiga cuál es la exposición real del ser humano a esos campos de radiofrecuencia. Por el momento, su percepción es que podemos estar tranquilos con el 5G.

Voces que avisan de los peligros del 5G

Pese al mensaje tranquilizador de la OMS, no todos los organismos están de acuerdo con esta apreciación. Primero, porque, como la propia Organización Mundial de la Salud indica, es demasiado pronto para saber si la excesiva exposición a la tecnología inalámbrica que conllevará la implantación del 5G puede repercutir o no en el ser humano. Organizaciones como Ecologistas en Acción avisan del peligro que implica el despliegue de esta nueva tecnología. Dicha asociación fue muy crítica en un comunicado, asegurando que todavía se desconocen los efectos sanitarios y ambientales del 5G y pidió mucha precaución a la sociedad. Ecologistas en Acción recordó en ese comunicado que la propia OMS calificó a las tecnologías inalámbricas como "cancerígenas de nivel 2B", es decir, baja probabilidad cancerígena, lo que sería un nivel menos peligroso que las bebidas alcohólicas o la carne procesada, como recuerda National Geographic. Por tanto, las incógnitas son muchas y, de momento, complicadas de resolver, puesto que el 5G acaba de llegar a nuestras vidas y no es posible comprobar ni predecir cómo ni cuánto afectará a nuestra salud.

Bulos sobre los efectos del 5G en la medicina

Si hemos llegado hasta aquí, planteándonos si la tecnología 5G es o no arriesgada para la salud, es porque las informaciones sobre este asunto son, a menudo, contradictorias. Existen muchas noticias acerca de este tema, especialmente en los últimos meses, cuando está desembarcando en España, pero no todo lo que se cuenta es verdad ni lo que es verdad es cien por cien demostrable. ¿Cuáles son esos bulos o fake news sobre los efectos del 5G en nuestra salud?

  • La Unión Europea no ha confirmado que el 5G sea perjudicial. Esa noticia es falsa. Al contrario, desde la UE se ha alertado de que existen muchas informaciones en internet y redes sociales que cuentan falsedades sobre esta nueva tecnología.
  • La radiación del 5G no es mayor que la que pueda emitir un electrodoméstico en casa, por tanto, la afirmación de que no es compatible con la salud es, cuanto menos, precipitada. El 5G no tiene una radiación más potente que el 4G o la TDT, por ejemplo.
  • ¿Arderá nuestra piel? Sí, se ha llegado a difundir que el uso de la tecnología 5G hará que tengamos más calor corporal. Tampoco es cierto, como te hemos dicho, el sistema que nos hace llegar esta tecnología puede provocar un pequeño aumento de la temperatura similar al de un frigorífico o un secador de pelo.
  • Y, no, tampoco el 5G es el responsable del coronavirus. La expansión de este virus convertido en grave pandemia mundial no se debe al lanzamiento del 5G. En este sentido, tampoco con las posibles vacunas del COVID-19 nos van a poder controlar al activar el 5G.

Aplicaciones del 5G en la salud

No es posible determinar todavía con un cien por cien de certeza cuáles pueden ser los peligros del 5G a nuestra salud, lo que sí se puede prever es la gran cantidad de aplicaciones que tendrá esta tecnología para mejorar nuestra salud. En atención sanitaria, la velocidad y la eliminación del retardo pueden significar un importante avance para la medicina. Entre todas las ventajas que traerá consigo la quinta generación de tecnologías de telefonía móvil podemos citar algunas muy interesantes:

  • Mejora de la telemedicina al mejorar las consultas virtuales.
  • Capacidad para realizar intervenciones quirúrgicas por control remoto sin riesgos por demora, mejorando las operaciones robóticas.

  • Posibilidad de monitorizar a pacientes a distancia y de llevar un control del enfermo en tiempo real.
  • Almacenamiento de datos para una atención más precisa y efectiva de los pacientes.

Éstas son sólo algunas de las aplicaciones que el 5G tendrá en la medicina y que, por tanto, contribuirán a la mejora de nuestra salud. La tecnología debe estar llamada para mejorar nuestra vida, no para empeorarla.