Vulvovaginitis en niñas: síntomas, causas y tratamiento

¿Qué es la vulvovaginitis?

Llamamos vulvovaginitis a la inflamación del tracto genital femenino externo, la vulva y la vagina. Es muy frecuente en niñas de entre 2 y 7 años y es el problema ginecológico más frecuente en las niñas prepuberales.

Son factores favorecedores de las vulvovaginitis:

• El bajo nivel de estrógenos a estas edades, que hace que la mucosa vaginal sea más susceptible a la infección (pH con poca acidez y tejido más fino).
• La menor protección del introito vaginal debido al escaso desarrollo de los labios mayores y menores.
• La ausencia de vello pubiano y la proximidad del recto y la vulva.

¿Cuáles son los síntomas de la vulvovaginitis?

Los síntomas son picor y enrojecimiento en la región genital, molestias o ardor al orinar, sangrado y secreción vaginal. En algunos casos pueden confundirse con infecciones de orina, pero no tienen relación.

¿Qué causa la vulvovaginitis? Tipos de vulvovaginitis

• La mayoría de las ocasiones son inespecíficas, y se producen por contaminación de gérmenes respiratorios o de las heces, ya que es muy habitual que a estas edades se limpien solas y no lo hagan del todo bien, o se toquen con las manos sucias. Otras veces se producen por irritaciones debido por ejemplo al uso de jabones perfumados o uso de ropa sintética muy apretada.
• Por lombrices (oxiuros) dando lugar a picor vaginal y anal, sobre todo nocturno.
• Vulvovaginitis bacteriana: infecciones por bacterias como el Streptococo spyogenes o Haemophilus influenza tipo b.
• Vulvovaginitis candidiásica: infecciones por hongos como Candida (más típico de adolescentes o niñas que aún usan pañal).
• Presencia de un cuerpo extraño (al igual que se meten algo por la nariz, a veces pueden hacerlo por la vagina).
• También pueden producirse por infecciones de transmisión sexual. Los gérmenes más frecuentemente implicados son Neisseria gonorrohoeae y Chlamydia trachomatis, pero si aparecen en niñas en ese caso debe investigarse la posibilidad de abuso.

Diferencia entre candidiasis y vulvovaginitis

La presencia de Candida albicans es muy rara en niñas prepuberales, pero debemos sospecharla en caso de un aumento de flujo o secreción vaginal que se acompaña de picor en niñas puberales y adolescentes.

¿Por qué aumentan las vulvovaginitis en verano?

Es habitual que haya más episodios de vulvovaginitis en verano debido al aumento de la humedad y de la temperatura, el sudor, así como mantener puesto el bañador húmedo durante mucho tiempo.

¿Cómo se diagnostica?

En la mayoría de los casos simplemente se diagnostica por los síntomas y la exploración física. En algunos casos puede ser necesario la realización de un cultivo de la secreción vaginal sobre todo si la vulvovaginitis es recurrente o no mejora; o la exploración ginecológica si se sospecha de la presencia de un cuerpo extraño dentro de la vagina.

¿Cómo se cura la vulvovaginitis? ¿Cómo se puede prevenir?

La mayoría de las vulvovaginitis al ser inespecíficas no precisan tratamiento, ya que mejoran siguiendo unas recomendaciones de higiene muy sencillas:

• Enseñar a la niña cómo limpiarse bien después de orinar o defecar: siempre de delante hacia atrás para evitar la introducción de bacterias patógenas o material fecal en la zona vulvovaginal.
• Evitar el uso de ropa muy ajustada (mallas, leotardos) y elegir preferiblemente ropa interior de algodón.
• No utilizar jabones perfumados o irritantes para limpiar la zona genital. Mejor lavar con suero fisiológico, soluciones antisépticas o productos específicos para higiene íntima infantil. Se pueden realizar baños de asiento (un baño de agua tibia a intervalos de 15 minutos). Evitar el uso de esponjas en esa zona.
• Secar completamente la zona después del baño
• Mejor utilizar camisones para dormir en lugar de pijama.
• Evitar el uso de suavizantes en la ropa interior.
• En caso de irritación puede aplicarse una crema protectora con óxido de zinc.

¿Cuándo acudir al médico?

La mayoría de las vulvovaginitis en la infancia son inespecíficas y responden bien a tratamientos tópicos locales y medidas higiénicas. Si a pesar de ello los síntomas persisten, no mejoran o empeoran es necesario consultar con el médico. En este caso se debe investigar la posibilidad de un cuerpo extraño vaginal o la existencia de una infección específica. En algunos casos sí puede ser necesario el uso de antibióticos para la vulvovaginitis o necesitar tratamiento con una crema con antifúngico si la causa es Candida.

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