Google recoge los frutos de su proyecto en el ámbito de la salud y, después de un primer intento fallido, vuelve a poner toda su maquinaria a funcionar para desarrollar y mejorar Google Health. Conoce los detalles de este proyecto.
Google Health, ¿qué es?
Google ha puesto en marcha una nueva funcionalidad dentro de sus productos para hacernos llevar una vida sana. En un año en el que todos coincidimos en que la salud es lo más importante, crece Google Health o Google Salud, una forma de ayudarnos a obtener información sobre salud de forma rápida y cómoda pero, sobre todo, fiable. El gigante tecnológico está en proceso de desarrollo de una app asistencial centrada en el ámbito de la salud, algo así como la telemedicina pero usando la inteligencia artificial con el objetivo final de poder diagnosticar enfermedades como el cáncer, prevenir patologías como la ceguera o predecir los resultados de los pacientes. Esta herramienta busca ser complementaria a nuestros médicos, acercando la información sanitaria a todo el mundo y haciéndola útil y accesible para todos. Muchos de nosotros, la gran mayoría, hemos buscado alguna vez información sobre salud a través de Google y sólo hemos conseguido tener síntomas que no teníamos y experimentar un miedo irracional que no ayuda a mejorar nuestra salud. No todo lo que encuentras en internet sobre salud es fiable y seguro que tu médico te ha dicho en más de una ocasión que no te fíes de lo que lees sobre este tema en la red porque Google no es médico. Por eso ahora su intención es que esa información sea de utilidad.
Aplicaciones de la herramienta Google Health
El objetivo principal de Google con esta app es proporcionarnos la información necesaria para responder al COVID-19. Durante la pandemia, la compañía ha hecho mucho hincapié en cuidar y filtrar toda la información de la manera más correcta posible porque sólo con una información veraz y fiable se pueden salvar vidas. Cada vez más personas se han interesado por cuestiones sanitarias y eso ha obligado a los equipos de Google a poner en marcha todas las herramientas y mecanismos de la comunidad médica, científica y de salud pública para abordar las necesidades derivadas de la pandemia. A partir de ahí, la app de Google Health -ya existía Google Health online con anterioridad- ha ido desarrollando otras aplicaciones para mejorar la salud de las personas.
¿Cómo y cuándo nació la idea?
Desde su nacimiento, hace ya más de una década, la idea de Google Health era aglutinar los datos médicos de una misma persona, lo que conocemos como su historial clínico, para que la información de diferentes centros pudiera almacenarse en una misma base de datos. Pero el servicio no funcionó porque muchos consideraron que se daba a terceros demasiada información privada. Luego se solucionó ese problema de seguridad y privacidad y ahora se da un paso más allá para mejorar este servicio. Google Health comenzó a prestar el servicio a hospitales y centros sanitarios, en lugar de enfocarlo a personas individuales, y eso se aplicó con algo más de éxito en la telemedicina, es decir, en las consultas online. Con la irrupción de la pandemia, las búsquedas sobre cuestiones sanitarias se dispararon en todo el mundo. Esto se debía, principalmente, a que muchos tenían miedo de acudir a sus centros sanitarios o de colapsar innecesariamente los hospitales y, también, al interés por las causas, consecuencias, síntomas y demás factores relacionados con el coronavirus. Por eso, Google ha decidido dar otra vuelta más de tuerca a su servicio y crear una app más completa y fiable sobre salud.
Inteligencia artificial como motor de Google Health
La preocupación por la salud es tal en estos momentos entre la población que, al incrementar las consultas médicas, la división de Salud de Google ha tenido que aumentar su número de trabajadores por encima de los quinientos de forma reciente. La crisis sanitaria del coronavirus ha consolidado el potencial de Google en el ámbito de la salud y, sobre todo, se ha abierto camino en el mercado de Estados Unidos, un país donde el coste de una simple consulta médica es muy elevado y, por tanto, prestar este servicio acudiendo únicamente a Google es una solución más que asequible para muchos ciudadanos. De ahí el cuidado puesto por el gigante tecnológico en ofrecer una información lo más fiable y segura posible. Google ha ido mejorando sus prestaciones en el ámbito de la salud desarrollando inteligencia artificial para analizar radiografías y otras pruebas médicas y poder así identificar enfermedades con un menor coste. Y también experimentó con ideas como la telemedicina, en la que los usuarios pudieran hablar directamente con un médico online sin necesidad de acudir a una consulta. En definitiva, utiliza la inteligencia artificial en salud, para lograr una nueva manera de mejorar la atención sanitaria. Google colaboró incluso con Apple para crear una app de rastreo de pacientes contagiados de COVID-19 y no son las únicas grandes compañías tecnológicas que han visto la oportunidad de crecimiento en el sector de la salud. La apuesta de Google se centra en la inteligencia artificial y en la adquisición de empresas de menor tamaño mediante acuerdos con startups sanitarias, especialmente enfocadas a la gestión de datos, un campo en el que Google es fuerte.
Objetivos de Google Health
Google Health trabaja principalmente con los hospitales, prestando ayuda para poder organizar la enorme cantidad de información de las historias clínicas de sus pacientes, que no siempre están todo lo informatizadas que se desearía. Tener toda esa información disponible facilita la labor de los médicos y demás sanitarios y realizar un seguimiento más correcto del paciente. Sirve para ahorrar tiempo a los sanitarios y, de paso, agilizar ciertas consultas que, para muchos pacientes, pueden resultar muy angustiosas por culpa de las esperas a la hora de obtener un resultado clínico, por ejemplo. Una vez demostrado todo su potencial, a Google le falta recuperar la confianza de los usuarios y por eso se afana por prestar un servicio fiable y que respete la privacidad de los pacientes.