¿Por qué aumentan los problemas de piel en verano?
Los problemas de piel aumentan en verano porque debido al aumento de la temperatura y al tipo de ropa que utilizamos, la superficie cutánea queda expuesta a cualquier tipo de agente externo, siendo más vulnerable. La exposición al sol, los baños, insectos, humedad, son factores que se relacionan con la mayoría de afecciones cutáneas que son típicas de la época estival.
Por ello a continuación vamos a hablar de las afecciones de la piel en verano más frecuentes, sus síntomas típicos y formas de prevenirlos y tratarlos. ¡Toma nota!
1. Quemadura solar
Es la respuesta inflamatoria de la piel a la agresión por la radiación ultravioleta. Se caracteriza por enrojecimiento y aumento de la sensibilidad y calor de la piel quemada, con posterior descamación de la piel dañada. Si es leve se pueden controlar aplicando compresas frías y cremas con corticoides y regeneradoras. Si es grave, con aparición de ampollas extensas y síntomas con fiebre o alteración del estado general, hay que valorar ingreso para rehidratación y cuidados de curas. Para evitarlas es muy importante evitar la exposición solar directa durante las horas centrales del día, utilizar siempre sombrillas, gorros, sombreros, ropas con UPF, gafas de sol, y siempre fotoprotección tópica y oral.
2. Pool Palms
Es una dermatitis friccional irritativa que aparece en las palmas de las manos de los niños que pasan muchas horas en las piscinas, por el roce continuo con la superficie rugosa del borde de la piscina. Se observan pulpejos de dedos muy enrojecidos e inflamado, a veces también las palmas. Si es molesto puede utilizarse alguna crema con corticoide tópico como tratamiento, pero habitualmente se resuelve de forma espontánea cuando cesa el estímulo del roce.
3. Moluscos contagiosos
Se trata de lesiones cutáneas producidas por una infección viral (“poxvirus”). Es muy frecuente en población pediátrica, y es muy contagiosa (de ahí su nombre). Aparecen pequeñas lesiones, como "granitos" rosados, o del color de la piel, con el centro umbilicado, que no suelen picar ni producir ningún síntoma. Si se rascan pueden sobre infectarse. Se contagian por el contacto directo con otra persona que los sufra (por eso es muy frecuente el contagio entre niños). Suelen ser "autorresolutivos", desapareciendo espontáneamente en meses. Si no, podemos utilizar láser o tratamientos tópicos que los irritan y los eliminan, pero suelen ser muy molestos para los niños.
4. Pitiriasis Versicolor
Es una infección frecuente producida por hongos del género “Malassezia Furfur”, que es un hongo que habitualmente vive en la piel, pero que, en ocasiones, favorecido por algunos desencadenantes, puede hacer un sobrecrecimiento y producir esta infección. Estos factores que pueden facilitar la aparición suelen ser la humedad (camisetas mojadas, sudor...), calor, o alteraciones en el sistema inmune. Se caracteriza por la aparición de placas y manchas de color rosado-anaranjado, con descamación superficial que se acentúa al rascar, localizadas en tronco y en raíz de extremidades superiores. Suele afectar a adultos jóvenes, es menos frecuente en niños.
Para su tratamiento se suelen utilizar antifúngicos tópicos (gel para ducha y cremas), aunque en casos extensos y resistentes es necesario tomarlos por vía oral.
5. Impétigo Contagioso
El impétigo es otra infección cutánea superficial, de origen bacteriano, muy contagiosa, que afecta sobre todo a niños. Se contagia por contacto con otra persona que sufra la infección.
Hay dos tipos:
- No ampolloso que es el más frecuente
- Ampolloso
El estafilococo aureus es la principal bacteria responsable. La infección suele comenzar en zonas de traumatismos mínimos, roces, picaduras…que actúan de puerta de entrada de la bacteria. Aparecen pequeñas heridas con costras de color amarillento “como la miel” que pueden ser únicas o extenderse por varias localizaciones de la superficie corporal.
Con respecto al tratamiento, es importante el lavado y retirada de costras y el uso de antibióticos tópicos para controlar la infección. También se recomienda el seguimiento por un pediatra.
6. Queratolisis Punctata
Es una infección bacteriana que suele afectar a los pies de adultos jóvenes, aunque también puede aparecer a otras edades. Son más frecuente en personas que trabajan con calzados cerrados (“de seguridad”), y en personas que andan descalzos. Aparecen en las plantas de los pies pequeños hoyuelos o depresiones que suelen asociarse a sudoración y mal olor.
Se recomienda calzado abierto, desodorante de pies, y para tratarla suele ser suficiente la aplicación de un antibiótico tópico.
7. Picaduras
Son frecuentes en verano por mosquitos. Aparecen lesiones tipo pápulas, que pican mucho. Suelen resolverse espontáneamente, pero en casos de pieles hipersensibles pueden inflamarse y precisar tratamiento con corticoide tópico y antihistamínicos. Para las picaduras de medusa el tratamiento es el mismo. En el caso de picaduras de arañas también puede ser suficiente ese tratamiento, pero es importante valorar porque en ocasiones sería recomendable asociar tratamiento antibiótico por vía oral.
8. Rosácea
La rosácea es una patología crónica de la piel en la que existe una alteración en la función de la glándula sebácea que da lugar a brotes de granitos, enrojecimiento, calor y quemazón en la zona facial. Puede aparecer en cualquier época del año, por la exposición solar, cambios de temperatura y el calor pueden actuar como desencadenantes.
En verano se recomienda extremar la fotoprotección, y evitar siempre el sol directo (con el uso de gorros, sombreros...), así como cambios bruscos de temperatura que pueden exacerbar los brotes.
9. Pie de atleta
El pie de atleta es como se conoce la “Tinea pedis” o “tiña del pie”, que es una infección por hongos dermatofitos. Aparece en personas que suelen usar calzados cerrados, el sudor favorece la proliferación de este hongo que produce alteraciones como fisuras, maceración entre los dedos de los pies que suele acompañarse de mal olor.
Se recomienda uso de calzado transpirable, evitar el uso del mismo calzado durante más de 3 días seguidos, secar muy bien los pliegues interdigitales tras el baño o ducha y evitar ir descalzo en sitios públicos. Para el tratamiento suelen ser necesarios antifúngicos por vía oral.
10. Foliculitis
Es la infección de los folículos pilosos que se manifiesta en formas de “granitos con pus”. Es frecuente tras la depilación. Para evitarla suele bastar con tener limpia la piel antes de la depilación y posteriormente lavar con agua y jabón. Para su tratamiento se utilizan antibiótico tópico. Existe un tipo especial de foliculitis, llamada “foliculitis de las piscinas”, que está producida por una bacteria, “Pseudomonas Aeruginosa”, que crece en aguas con temperaturas cálidas (jacuzzis, balnearios, parques acuáticos y más raramente en otro tipo de piscinas). Los síntomas aparecen a los pocos días del baño y se caracterizan por la aparición de granitos con pus por todo el cuerpo. Es "autolimitado", pero suele requerir tratamiento antibiótico para su eliminación
¿Cuándo acudir al dermatólogo?
Estaría indicado acudir al médico en aquellos casos en los que las lesiones no se resuelvan en pocos días y cuando aparezca alteración del estado general, con malestar o fiebre.
Si sufres de alguno de estos problemas de piel o padeces otro tipo de afección cutánea recuerda que en DoctorGO tienes a tu disposición dermatólogos online que te atenderán sin tener que salir de casa y sin interrumpir tus vacaciones.
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