¿En qué consiste la técnica de la tortuga?

La técnica de la tortuga es una herramienta de manejo emocional para niños que se basa en la metáfora de la tortuga: un animal que avanza lenta y constantemente hacia su destino.

En términos de manejo emocional, se refiere a la importancia de aprender a reconocer y manejar las emociones de una manera lenta y constante, en lugar de reaccionar de manera impulsiva (como suelen hacer los niños).

La técnica de la tortuga se enseña a los niños para que aprendan a reconocer sus emociones, y proporciona estrategias para manejarlas de manera efectiva, tales como la respiración profunda, la visualización, y la expresión verbal o escrita de sus emociones.

Estas estrategias les permiten tomarse un tiempo para procesar sus emociones antes de reaccionar, y así tomar decisiones más razonables y no dejarse llevar tan a menudo por la impulsividad.

Fases de aplicación de técnica de la tortuga

La técnica de la tortuga se puede dividir en varias fases o pasos, aunque pueden variar ligeramente dependiendo de la fuente o el programa específico que utilice. A continuación, detallamos los pasos generales que se siguen para aplicar esta técnica:

1.Identificar las emociones

El primer paso es ayudar al niño a reconocer y nombrar las emociones que está experimentando. Esto puede incluir el uso de una "tabla de emociones" o "rueda de emociones" para ayudar a los niños a identificar cómo se sienten (normalmente no conocen las palabras para identificar lo que sienten y les viene bien algo de ayuda).

2. Aprender a regular las emociones:

Una vez que el niño ha identificado sus emociones, se le enseña a regularlas mediante técnicas de relajación, como la respiración profunda, el yoga o la meditación.

3. Expresión verbal o escrita:

Se anima al niño a expresar sus emociones a través de la escritura o el dibujo, o mediante un diálogo abierto y seguro con un adulto de confianza.

4. Tomar acción:

Una vez que el niño ha aprendido a reconocer y regular sus emociones, se le enseña a tomar acción de manera efectiva, ya sea mediante la solución de problemas, la comunicación asertiva o la toma de decisiones.

5. Practicar constantemente:

La técnica de la tortuga es un proceso continuo que requiere práctica y repetición para que se convierta en un hábito. Es importante que el niño practique regularmente para que pueda manejar sus emociones de manera efectiva en situaciones cotidianas.

Es importante que los pasos se adapten a la edad y las necesidades del niño, y que se le brinde un ambiente seguro y comprensivo para que pueda aprender a manejar sus emociones.

tecnica tortuga

Aprendizaje del cuento de la tortuga

El cuento de la tortuga es una metáfora para enseñar a los niños nociones básicas de autocontrol. A lo largo del cuento se utiliza a una tortuga como personaje principal, y los niños van aprendiendo los 3 pasos principales de la técnica de la tortuga: parar, respirar y reflexionar sobre los problemas y sus soluciones.

¿Qué beneficios tiene la técnica de la tortuga?

La técnica de la tortuga tiene varios beneficios para el manejo emocional de los niños, algunos de ellos son los siguientes:

1. Aprendizaje de la regulación emocional

La técnica de la tortuga ayuda a los niños a aprender a reconocer y regular sus emociones de manera efectiva mediante la práctica de técnicas de relajación, como la respiración profunda o la meditación.

2. Mejora de la capacidad de comunicación

La técnica de la tortuga fomenta la expresión verbal o escrita de las emociones, lo que ayuda a los niños a aprender a comunicar sus sentimientos de manera efectiva y a desarrollar habilidades de comunicación asertiva.

3. Reducción del estrés y la ansiedad

La técnica de la tortuga ayuda a los niños a manejar mejor su estrés y ansiedad al aprender a reconocer y regular sus emociones de manera efectiva.

4. Mejora de la toma de decisiones

Al aprender a reconocer y regular sus emociones, los niños pueden tomar decisiones más informadas y manejar situaciones de manera más efectiva.

5. Fomento de la resiliencia

La técnica de la tortuga ayuda a los niños a desarrollar habilidades para manejar situaciones difíciles, lo que les ayuda a ser más resilientes y a enfrentar problemas con más confianza.

6. Mejora de la autoestima

Al aprender a manejar sus emociones de manera efectiva, los niños pueden sentir un mayor control sobre sus vidas y una mayor autoestima.

7. Fomenta la paciencia y la perseverancia

Al enseñarles a avanzar lenta y constantemente en lugar de presionarse por alcanzar un objetivo inmediato, los niños aprenden la importancia de la paciencia y la perseverancia para alcanzar sus metas.

¿Qué debemos de saber o tener en cuenta a la hora de aplicar esta técnica?

A la hora de aplicar la técnica de la tortuga, es importante tener en cuenta lo siguiente:

  1. Adaptarse a las necesidades del niño.
  2. Crear un ambiente seguro.
  3. Es importante enseñar las técnicas de manera gradual para no sobrecargar al niño y ayudarle a desarrollar habilidades a un ritmo adecuado para él.
  4. Practicar constantemente.
  5. Fomentar la expresión verbal o escrita
  6. Acompañamiento y seguimiento
  7. No forzar el proceso
  8. Adaptar la técnica

En general, es importante ser paciente y comprensivo mientras se ayuda al niño a aprender a manejar sus emociones de manera efectiva a través de la técnica de la tortuga.

impulsividad niños

Otras pautas para tranquilizar al niño enfadado/con episodio de ira

Lo mejor para ayudar a un niño a calmar sus enfados es validar sus emociones y animarle a expresar su enfado o frustración con tranquilidad. Los adultos debemos dar ejemplo, y es muy difícil ayudar a los niños si sus padres son los primeros que resuelven las discusiones levantando la voz o imponiendo las cosas desde un estilo autoritario. La mejor forma de ayudar a los niños a aprender sobre el diálogo es dialogando en casa, pues absorben aprendizajes como esponjas.

¿Cuándo deberemos consultar con un profesional? - Señales de alarma

Es importante consultar con un psicólogo si los problemas de ira de su hijo están interfiriendo en su capacidad para funcionar en la escuela, en su hogar o en sus relaciones sociales.

Algunas señales de alarma que pueden indicar que su hijo necesita ayuda incluyen:

  • Comportamiento violento o destructivo
  • Agresión hacia personas o animales
  • Problemas para controlar la ira en situaciones específicas o en general
  • Problemas para regular las emociones
  • Dificultad para hacer amigos o mantener relaciones sociales
  • Comportamiento auto-destructivo o auto-daño
  • Problemas para concentrarse o rendir en la escuela

Si nota alguna de estas señales, es importante buscar ayuda de un profesional de psicólogos infantiles.