Cómo planificar un embarazo paso a paso

¿Por qué es importante planificar un embarazo?

Lo primero de todo: si has decidido buscar un embarazo es importante que realices una consulta preconcepcional para poder identificar las condiciones sociales y médicas tanto maternas como paternas que puedan ser optimizadas antes de la concepción con el fin de incrementar las posibilidades de un resultado perinatal favorable.

La salud durante el embarazo depende en gran medida del estado de salud, nutrición, hábitos y estilo de vida de la mujer antes de concebir. Las opciones de mejorar la salud y el resultado del embarazo son menores cuando ya se ha producido la concepción; además, el periodo de máxima vulnerabilidad para el embrión tiene lugar dentro de las diez primeras semanas de gestación, muchas veces antes de que la mujer conozca su gestación, por lo que la aplicación de muchas actividades preventivas puede realizarse tarde si no se ha planificado previamente el embarazo.

Anticonceptivos

Si ya lo tienes decidido y estás usando un método anticonceptivo, lo primero que tienes que hacer es dejar de usarlo. Con el uso de anticonceptivos hormonales tanto orales como DIU o implante subcutáneo la recuperación de la fertilidad es inmediata, una vez se deja de usar el anticonceptivo, los ovarios recuperan su actividad normal. No es así, en el caso del uso de inyecciones de medroxiprogesterona, en cuyo caso, la fertilidad tarda en restaurarse unos meses.

Conoce tu ciclo menstrual

Te será muy útil conocer tu ciclo menstrual y cómo funcionan los ovarios para así poder maximizar las posibilidades de quedarte embarazada en cada ciclo. Conociendo tus ciclos podrás saber cuáles son tus días más fértiles, que son los que se encuentran alrededor de la ovulación, a mitad de ciclo (en una mujer con ciclos de 28 días, el día de la ovulación suele ser el día 14 de ciclo). Si concentras las relaciones sexuales en estos días tendrás más posibilidades de conseguir un embarazo.

Además, es importante mantener una frecuencia de relaciones sexuales adecuada para poder tener más opciones de quedarte embarazada, por lo que durante los días probables de ovulación se recomienda por lo menos tener relaciones sexuales una vez al día.

Asesoramiento genético

Si tú o tu pareja padecéis una enfermedad hereditaria es importante que consultes con tu ginecólogo para valorar los riesgos de transmisión a la descendencia y valorar si es necesario realizar alguna técnica para evitar transmitir esa enfermedad a tus hijos (como el diagnóstico genético preimplantacional, técnica en la que se estudian a los embriones antes de transferirlos a la madre).

Suplementos alimenticios durante el embarazo

Es importante que empieces a tomar aproximadamente tres meses antes de quedarte embarazada suplementos con ácido fólico para la prevención de los defectos del tubo neural del bebé. Dependiendo de si tienes enfermedades que dificulten la absorción de alimentos o tomas ciertos medicamentos, la dosis requerida de ácido fólico será mayor o menor (esto se valorará en la consulta preconcepcional). Hay muchos suplementos que contienen ácido fólico, pero el más recomendable es su forma activa, o L-metilfolato, ya que el cuerpo puede aprovecharlo directamente y no necesita ser transformado.

También es importante conseguir niveles óptimos de vitamina D ya que se ha demostrado su importancia para conseguir buenos resultados tanto en la búsqueda de la gestación como en el embarazo en sí.

Cuida tu alimentación y salud

Debes cuidar tu alimentación, que sea sana y equilibrada, evitando grasas saturadas, alimentos ultraprocesados y azúcares añadidos. Además, es aconsejable conseguir una situación de normopeso previa al embarazo ya que favorece la consecución del embarazo y hace que éste se desarrolle de manera más propicia.

Así mismo es muy importante también el ejercicio físico, ya que ha demostrado ser beneficioso tanto para la madre como para el futuro bebé y puede también ayudarte a conseguir un embarazo lo más saludable posible.

Hazte una revisión ginecológica

Es importante que acudas a una consulta preconcepcional con el ginecólogo para poder identificar los factores de riesgo que puede tener tu embarazo. Se realizará una historia clínica a ambos progenitores para descartar enfermedades y evaluar la posibilidad de enfermedades hereditarias, en cuyo caso se derivaría a una consulta específica de genética.

En dicha consulta, se realizará una exploración física y ginecológica y se solicitará una analítica completa para valorar el estado de salud de la madre.

Además, el ginecólogo puede resolver tus dudas y explicarte cómo puedes optimizar tus posibilidades de embarazo.

Evita el tabaco

Debes evitar fumar tanto previamente como durante el embarazo. El tabaco es un tóxico que perjudica nuestra salud de forma generalizada, afectando a múltiples órganos del cuerpo. Puede hacer que las condiciones para conseguir el embarazo sean subóptimas, así como pueden perjudicar el curso de la gestación, provocando alteraciones en la placenta y en el crecimiento fetal.

Evita el alcohol y las drogas

Son perjudiciales para ti, pueden hacer más difícil que consigas quedarte embarazada y además están relacionados con malos resultados perinatales ya que pueden provocar defectos morfológicos en el bebé.

Cuida tu salud mental

Al igual que la salud física es importante cuidar la salud mental. Debes estar tranquila, estando segura de tu decisión y minimizar la ansiedad para poder enfrentarte a la búsqueda de embarazo y a la consecución del mismo con la menor incertidumbre posible y serenidad. Puedes buscar ayuda en profesionales si presentas síntomas como ansiedad, irritabilidad, tristeza…

¿Cuál es el tiempo medio para quedarte embarazada?

Si no consigues quedarte embarazada inmediatamente ¡tranquila! La tasa de embarazo espontáneo en cada ciclo por separado es muy baja por lo que no debes desanimarte. Se considera normal en una pareja sana y por debajo de los 35 años un año de búsqueda. Si tus ciclos son irregulares y tienes más de 35 años puedes consultar antes con tu ginecólogo.

Técnicas de reproducción asistida

Dependiendo de cada caso, las técnicas de reproducción asistida pueden ser distintas, desde una estimulación ovárica con coitos dirigidos, inseminación, fecundación in vitro…

Todas las técnicas de reproducción se basan en la administración de medicación para estimular la ovulación y después producir la fecundación de forma natural (con coitos dirigidos), a través de inseminación de semen de la pareja en la vagina de la mujer o extrayendo el ovocito del cuerpo de la mujer y fecundarlo con el semen en el exterior.

¿A qué edad se recomienda quedarte embarazada?

Tienes que saber que por encima de los 35 años la calidad de los ovocitos comienza a decaer y, por tanto, la fertilidad. Es más difícil quedarte embarazada conforme te haces mayor, pero esto no debe precipitar la búsqueda de embarazo si no estás preparada o tus condiciones físico-psíquicas no son las óptimas. Si quieres ser madre, pero más adelante o no lo tienes claro en la actualidad, puedes optar por la vitrificación de tus ovocitos, para, en caso de querer quedarte embarazada en un futuro poder disponer de ovocitos propios de buena calidad.

¿Cuándo acudir al ginecólogo?

En caso de que no consigáis embarazo de forma natural pasado cierto periodo de tiempo (más de un año de forma general o más de seis meses si tus ciclos son irregulares y tienes más de 35 años) se aconseja que acudáis al ginecólogo para valorar el inicio de un estudio de fertilidad de cara a posibles técnicas de reproducción.