¿Qué es la enfermedad de manos, pies y boca?

Se trata de una infección altamente contagiosa producida por virus. Aunque puede afectar a cualquier edad es más habitual en menores de 5 años y se presenta generalmente en forma de brotes.

Principales causas de la infección

La enfermedad boca mano pie está causada por un grupo de virus llamados enterovirus, dentro de los cuales el más frecuente es el Coxsakievirus A16 y el enterovirus 71. Estos virus circulan durante todo el año, pero son algo más habituales en primavera y principios de otoño.

Síntomas

Suele iniciarse con fiebre que suele durar 1-2 días, acompañado de un cuadro catarral leve y malestar general. Lo más característico es la aparición posterior de pequeñas vesículas y ampollas en manos y pies, alrededor de la boca, dentro de la cavidad oral y en la zona del pañal. Las lesiones de la piel suelen desaparecen a los 5-10 días sin dejar cicatrices.

¿Es lo mismo que la glosopeda?

La enfermedad de boca mano pie puede confundirse con la glosopeda o fiebre aftosa, pero ésta afecta a los animales, en concreto al ganado bovino, ovino, porcino y caprino. Es también una enfermedad infecciosa pero causada por virus de otra familia. La glospodea se caracteriza por originar fiebre y lesiones de tipo vesicular en mucosas y pezuñas. Se considera que los seres humanos no contraen la enfermedad.

¿La enfermedad manos, pies y boca se contagia solo entre niños?

La enfermedad de mano, pies y boca se contagia persona a persona a través de contacto directo: boca, saliva, secreciones de la nariz o las gotas que se producen al estornudar, hablar o toser. También a través del líquido de las vesículas o a través de las heces. El virus también puede vivir en objetos que el niño toca, como pañuelos, ropa, toallas, sábanas...

La infección, aunque es típica de los niños pequeños puede afectar a personas de cualquier edad, incluyendo también a los adultos.

contagio enfermedad mano boca pie

Complicaciones de la enfermedad

Las complicaciones no son habituales, y suele tratarse de una enfermedad benigna. La mayoría de los niños afectados se recupera en 7-10 días sin necesidad de un tratamiento específico.

  • Deshidratación

Las lesiones en la boca y la garganta pueden ser muy dolorosas, lo que puede dificultar la ingestión de líquidos. Esto aumenta el riesgo de sufrir deshidratación, de ahí la importancia de asegurar un adecuado aporte de líquidos y controlar adecuadamente el dolor.

  • Sobreinfección cutánea

Es importante mantener las lesiones bien limpias y secas. También se deben lavar las manos con agua y jabón, secándolas con cuidado y sin frotar. En algunas ocasiones las lesiones pueden sobreinfectarse, por lo que en estos casos puede ser necesario una pomada antibiótica.

  • Onicomadesis

Es muy habitual que tras 4-5 semanas tras la infección, ocurra un despegamiento y caída de las uñas de las manos o de los pies. No hay motivo por el que preocuparse, las uñas volverán a crecer con normalidad.

  • Complicaciones neurológicas

Son complicaciones más severas pero muy raras, como la meningitis, parálisis flácida aguda y encefalitis.

Tratamiento para la enfermedad manos, pies y boca

El tratamiento es sintomático, ya que la enfermedad se resuelve por sí sola. En caso de fiebre o para aliviar el dolor podemos administrar paracetamol o ibuprofeno. Nos podremos de ayudar de geles orales para aliviar las molestias relacionadas con las úlceras que aparecen en boca, encías y lengua.

Es muy importante mantener al niño bien hidratado, ofreciéndole líquidos de forma frecuente. No se debe forzar al niño a comer, pero elegiremos alimentos blandos (yogures, purés, cremas...) o alimentos o bebidas frías. Evitaremos alimentos salados, picantes, ácidos o muy calientes, ya que pueden empeorar el dolor.

¿Cómo prevenir la infección?

Para prevenir la enfermedad es importante:

  • Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón.
  • Evitar entrar en contacto con otros niños enfermos, compartir alimentos, bebidas, vasos, cubiertos...
  • Desinfectar objetos o superficies que hayan estado en contacto con el niño.

¿Puede ir a la guardería?

La enfermedad boca mano pie no precisa exclusión escolar. Una vez que el niño se encuentre bien, sin fiebre, podría volver a la escuela con normalidad. Esto es así ya que muchos niños cursan la infección de forma asintomática y porque el periodo de contagio ocurre antes de la aparición de los síntomas y también después de que se hayan resuelto, por lo que excluir al niño del colegio no es una medida eficaz para disminuir la transmisión.

¿Cuándo acudir al médico?

Aunque suele ser una enfermedad leve y de curación espontánea, es recomendable consultar al pediatra para confirmar que se trata de una enfermedad boca mano pie, ya que hay otras infecciones que pueden cursar con lesiones parecidas. Posteriormente debemos consultar si:

  • El niño no quiere comer ni beber nada
  • Aparecen signos de deshidratación: boca seca, ojos hundidos, disminución de la cantidad de orina...
  • Si el niño está muy irritable, decaído o tiene dolor de cuello
Bibliografía
  • https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/enfermedad-boca-mano-pie